Sánchez acusa a PP y Cs de querer perpetuar la crisis catalana
El presidente de Gobierno, Pedro Sánchez, mantiene su intención de buscar una salida dialogada para Cataluña
Pedro Sánchez descalifica la posición de PP y Ciudadanos, por entender que “aquellos que hablan del artículo 155 y que abogan por un 155 perpetuo, lo que quieren es perpetuar la crisis en Cataluña”. Critica también a ambos partidos por su pacto con Vox en Andalucía. Así lo ha manifestado en una entrevista concedida a Efe, en la que ha adelantado que este viernes el Consejo de Ministros aprobará el proyecto de ley de Presupuestos Generales del Estado de 2019 para que se inicie su tramitación parlamentaria, sin tener garantizados los apoyos necesarios, y mantiene su decisión de agotar la legislatura.
“De lo que está ocurriendo durante estos últimos meses desde la moción de censura, yo diría que el único partido que es leal con la Constitución, ya sea en el Gobierno o en la oposición, es el Partido Socialista Obrero Español”, asegura el jefe del Ejecutivo.
Sánchez explica que el diálogo abierto con el presidente de la Generalitat, Quim Torra, pretende buscar “cómo resolver la crisis política que vive Cataluña desde hace diez años”.
“Las fuerzas parlamentarias catalanas tienen que saber que tienen que abandonar la unilateralidad, que tienen que ser conscientes de que cualquier quiebra de la Constitución o quiebra de la legalidad estatutaria en Cataluña y en el conjunto del país no solamente les sitúa fuera de la Constitución española y de España, les sitúa también fuera de lo que representan los tratados fundacionales de la Unión Europea, les sitúa fuera de la Unión Europea”, asegura.
El presidente del Gobierno, además, recuerda que “no hay una mayoría social que apueste por la independencia” y añade que, por eso, “hay un problema de convivencia, no hay un problema de independencia en Cataluña”.
Explica que “los catalanes no tienen un Estatuto que ellos votaron, que fue un Estatuto que fue recortado como consecuencia de una sentencia del Tribunal Constitucional a propuesta del principal partido de la oposición entonces, que es el PP”.
Su conclusión es que “la salida última lógicamente tiene que ser una votación por un mayor autogobierno y, en consecuencia, por un nuevo acuerdo que tiene que representar el Estatuto de Cataluña”.
Para Sánchez, en Cataluña “solamente se podrá encontrar una solución desde el sosiego, la sensatez, el sentido de Estado y, por supuesto, el poner la mirada larga”. “Es decir, no precipitarnos”, añade. Y considera que hay que ser conscientes de que “la propuesta política que resuelva la crisis en Cataluña tiene que salir de Cataluña”.
El debate territorial y Cataluña, según Sánchez, son utilizados por PP y Ciudadanos para hacer política: “A las fuerzas de la oposición se lo digo, que no es posible continuar con el agravio territorial como fórmula de hacer oposición al Gobierno de España; lo que necesitamos es precisamente lo contrario, es tener sentido de Estado también desde la oposición”, dice, para reiterar a continuación que la aplicación del artículo 155 “no resuelve la crisis política en Cataluña”.
Cuando se aplicó con anterioridad “lo que hacía era devolver a la legalidad una situación que se había dislocado como consecuencia de la quiebra unilateral por parte del independentismo, tanto de las reglas estatutarias como constitucionales”.
En su opinión, el Consejo de Ministros celebrado en diciembre en Barcelona y la “declaración de mínimos” de Pedralbes sirvió para explicar que “hay una crisis política que tenemos que resolver, desde el diálogo y desde el cumplimiento de la ley, desde el respeto a la legalidad”. Y sirvió también, ha añadido, para visualizar que “el independentismo es consciente de que tiene que construir consensos transversales. Es decir, que cuenten con el apoyo mayoritario de la sociedad catalana”.
Sánchez elude ahora responder si considera que hay delito de rebelión en la actuación de los procesados en el Tribunal Supremo por el proceso independentista y tampoco se pronuncia sobre un hipotético indulto en caso de condena.
El presidente desvincula el diálogo en Cataluña con las negociaciones de los Presupuestos.
Liberalismo, elecciones, presupuestos
En un momento de la entrevista, Sánchez ha asegurado que no solo quiere representar a la socialdemocracia en España sino también al “liberalismo” al que Ciudadanos ha dejado “huérfano” tras echarse “en brazos de Vox”. El presidente, añade, ha hablado con muchos líderes liberales europeos que “no entienden la actitud” del líder de Cs, Albert Rivera, de “pactar con la ultraderecha en España” en Andalucía, una decisión que para Sánchez es un error.
A los electores se ha dirigido para decirles “que yo también aspiro a representar no solo a la parte socialdemócrata en nuestro país, sino también a esa corriente liberal que representa tolerancia, el respeto a las minorías, los derechos y las libertades” que precisamente ponen “en cuestión formaciones con las que está pactando Ciudadanos”.
A la pregunta de si serán posibles pactos del PSOE con Ciudadanos en el futuro, señala que “si uno se atiene a los hechos” ve que lo que ha ocurrido “siempre” es “lo contrario” porque, como se ha demostrado en regiones como Madrid o Murcia o en la moción de censura contra Mariano Rajoy, cuando Cs “ha tenido que elegir siempre ha mirado a la derecha, siempre ha mirado al PP”.
Critica también el jefe del Ejecutivo y secretario general del PSOE al Partido Popular y considera que con la llegada de Pablo Casado se ha instalado la crispación y el discurso del odio en ese partido.
Para Sánchez, cuando Casado dice que la única forma de gobernar y de desbancar al PSOE será con el entendimiento entre PP, Cs y Vox está, por un lado, “renunciando a ganar elecciones y a representar a un amplio espectro del electorado español” mientras, por otro, está “ligando su futuro político al de Vox“.
“Y eso es malo no solamente para la derecha española, sino para el conjunto del sistema político español”, ha advertido.
Sobre la polémica suscitada por el uso del avión oficial, Pedro Sánchez asegura que el uso que hace responde a “criterios estrictamente de seguridad” y considera que el tuit rebotado desde la cuenta oficial del PP en el que se bromeaba sobre su muerte es una muestra de que los populares “no reconocen la legitimidad de este Gobierno“.
“El mismo partido político que a través de un vídeo me desea la muerte es el que me está calificando como golpista o como presidente ilegítimo. Es muy importante ser consciente del deterioro de la calidad democrática y de los ataques que se están produciendo a la Presidencia del Gobierno por parte de un partido, el PP, que considera que gobernar es una especie de derecho natural y un patrimonio solamente del Partido Popular”, explica.
Preguntado por el tema de la exhumación de Franco, el presidente del Gobierno admite que el proceso se ha complicado más de lo que había previsto.
“Está siendo más largo de lo que inicialmente previmos, pero creo que eso es bueno, porque está garantizando el derecho en este caso de las personas aludidas de poder alegar, plantear sus diferentes visiones y sus discrepancias y, cuando llegue el momento y se finalice el procedimiento administrativo, el Consejo de Ministros resolverá”, asegura.
A la pregunta de por qué no convoca elecciones, el presidente responde que “tenemos un programa de Gobierno que estamos desarrollando desde el minuto uno de la moción de censura, quisimos primero garantizar la estabilidad social, económica y política y eso creo que es lo que está haciendo el Gobierno. Por tanto, si tenemos una ambición es la de agotar la legislatura y la de presentar los presupuestos en este mes de enero”.
Sobre la posibilidad de que los presupuestos no salgan adelante por falta de apoyos suficientes ha insistido en que “el planteamiento del Gobierno de España es presentar los presupuestos y los vamos a presentar en el próximo Consejo de Ministros del día 11 de enero, el próximo viernes; unos presupuestos para que España avance, continúe avanzando en política social, en crecimiento económico y en la creación de empleo y en la dignidad laboral. Por lo tanto, van a ser unos presupuestos cargados de sentido común y también de valores sociales que hacen falta en nuestro país”.
Y para que salgan adelante, el Grupo Socialista va a dialogar “con todas las fuerzas parlamentarias, no solamente vamos a mirar a las fuerzas independentistas sino también a aquellas fuerzas parlamentarias que están pidiendo no depender solamente de las fuerzas independentistas para poder sacar los presupuestos les vamos a tender la mano. Le vamos a tender la mano también a Ciudadanos y al PP. Creo que es importante que estos buenos datos que hay de crecimiento económico y de creación de empleo se consoliden en el año 2019”.
Sobre la celebración de elecciones generales y el temor de los llamados ‘barones’ del PSOE de que se celebren en mayo con las municipales, autonómicas y europeas, Sánchez ha reiterado que “el planteamiento siempre ha sido el mismo, agotar la legislatura, llegar hasta el año 2020 y, sobre todo, modernizar nuestra economía, fortalecer la cohesión social y territorial de nuestro país y apuntalar la regeneración democrática de nuestro país”.
En relación con los comicios de mayo, el presidente Sánchez no descarta que Josep Borrell pueda encabezar la lista del PSOE a la Eurocámara. “Yo creo que (Borrell) es un extraordinario ministro de Asuntos Exteriores y podría ser también, lógicamente, un extraordinario candidato a las elecciones europeas, pero insisto, hay muchas más personas”, afirma.
El próximo mes de febrero el PSOE darán a conocer sus candidaturas en las que, según Sánchez, “habrá independientes, como los ha habido en el Gobierno de España”.
Fuente | The Objective