Luisa Carcedo: “El ingreso mínimo vital combate la desigualdad y los efectos más perjudiciales de la pobreza”
La diputada socialista destaca el papel fundamental que tendrá el IMV en la protección de las familias y de la infancia porque, según Carcedo, “la pobreza no se contagia, pero se hereda, y hay muchos niños y niñas que nacen pobres y pueden tener ese lastre toda su vida”
“En este país hay una redistribución injusta de la riqueza, y eso se llama desigualdad. El ingreso mínimo vital combate la desigualdad y los efectos más perjudiciales de la pobreza”, ha defendido hoy la diputada socialista, Luisa Carcedo, quien también explicó que, de este modo, se viene a completar el Estado del Bienestar en nuestro país. Asimismo, quiso aclarar a la bancada de la derecha que el IMV no es un servicio social, sino una renta que sirve para combatir la pobreza, la cual “no se contagia, pero se hereda, y hay muchos niños y niñas que nacen pobres y pueden tener ese lastre toda su vida”.
“Hagámonos perdonar por una parte importante de nuestra infancia que está en situación de pobreza y grandes desventajas para su futuro”, dijo Luisa Carcedo, que recordó que existen informes elaborados por organismos como Eurostat, a través de AROPE, que cifran en un tercio los niños y niñas españoles que viven por debajo del umbral de la pobreza. Además, son muchos los organismos internacionales que recuerdan a España que el sistema de redistribución de la riqueza es injusto y, de ahí, prosiguió, surge la necesidad de aprobar el IMV.
Durante su intervención en la tribuna de oradores, Luisa Carcedo expuso que, como políticos, los diputados tienen la obligación y el mandato constitucional de dotar de un sistema de protección a las personas que están en una situación de necesidad y “muchos de nuestros conciudadanos lo están, por eso, tenemos que proteger a todas las familias ya los niños, de acuerdo con los compromisos internacionales”.
La diputada recordó que “cuando se pone en marcha una política de este tipo surgen los temores y las desconfianzas. Les aseguro que si estuviésemos debatiendo una deducción fiscal para gente con rentas altas, en vez del ingreso mínimo vital, aquí no habría ninguna palabra sobre fraudes”. “Tengamos un poco de respeto por nuestros conciudadanos que no son de segunda, son tan de primera como nosotros. Son iguales. Basta de apriorismos ideológicos en el análisis de esta política pública”, concluyó Carcedo.
Pese a ello, Carcedo mostró su satisfacción por el consenso que ha logrado en la Cámara esta medida que sirve para completar el Estado Social, con una nueva red de protección para las personas que están en situación de necesidad, implementando la justicia social.