Un error técnico en la tramitación administrativa propició el inicio de las obras de exhumación en el Cementerio Viejo sin contrato
La concejala de Cultura, Marga Antón, ordenó la paralización de los trabajos en cuanto tuvo conocimiento de la existencia del error
“Nunca ha habido mala fe por parte de los técnicos ni de la concejalía de Cultura, y tampoco arbitrariedad en la selección de la empresa que ha llevado a cabo los trabajos”, ha señalado Antón
Un error técnico en la tramitación administrativa propició que las obras de exhumación de cadáveres de los represaliados en el Cementerio Viejo de Elche se iniciaran sin el correspondiente contrato.
“No hay contrato y las obras las paré en el momento en que me di cuenta de que había un error técnico en la tramitación del expediente administrativo”, ha asegurado la concejala, quien ha comparecido ante los medios de comunicación junto por el portavoz adjunto del equipo de Gobierno Ramón Abad.
Antón ha sido tajante al asegurar que “nunca ha habido mala fe por parte de los técnicos ni de la concejalía de Cultura, y tampoco arbitrariedad en la selección de la empresa que ha llevado a cabo los trabajos”.
La concejala ha reconocido que efectivamente no había contrato, pero sí el correspondiente expediente en el que se especificaba que la empresa Drakkar presentaba la mejor propuesta para llevar a los trabajos.
Marga Antón ha explicado que el error se produce en el momento en que los técnicos inician un expediente de Contrato Menor de Obras en lugar de un Contrato de Servicio, que sería el adecuado para esta actuación.
Posteriormente se realiza un informe técnico sobre las tres propuestas presentadas y se propone adjudicar la obra a la empresa Drakkar. Seguidamente se pide autorización a la conselleria presentando el proyecto de intervención del arqueólogo y la dirección de Cultura de la Generalitat autoriza los trabajos.
Tras obtener la autorización de conselleria y haberse propuesto adjudicataria se inician los trabajos de exhumación, hasta que el expediente llega al vicesecretario que advierte a la concejala del error y la edil ordena la paralización de la obra el 21 de octubre.
Por su parte, Ramón Abad, ha señalado que Marga Antón cuenta con el apoyo del Equipo de Gobierno. “Es evidente que no hay arbitrariedad en la elección de la empresa, ya que hay informes técnicos diciendo que la propuesta era la más interesante”.
El portavoz adjunto ha indicado que “como en cualquier departamento, cuando se detecta una anomalía u error, se abre una investigación y si fuera necesario se depurarían responsabilidades”.
Además, Marga Antón se ha mostrado dispuesta a dar todas las explicaciones, tanto en el ámbito público como institucional, acerca de lo acontecido.