La edil asevera que Alcaldía trasladó al Síndic en enero que acataba las recomendaciones sobre el uso indebido de la comunicación “y 15 días después el propio alcalde estaba ya incumpliendo esas directrices”
La concejala del Grupo Municipal Socialista, Patricia Maciá, ha dado a conocer la segunda resolución del Síndic de Greuges emitida ayer, tanto al grupo municipal como a Alcaldía, sobre la queja que los socialistas interpusieron en febrero por continuar usando los medios de comunicación municipales y la sala de prensa para criticar y descalificar al adversario político. “Segundo varapalo del Síndic de Greuges a Pablo Ruz y a Vox por el mal uso que están llevando a cabo de los medios públicos como redes sociales municipales y sala de prensa. En menos de un año, PP y VOX han recibido dos tirones de orejas por parte del alto comisionado de Les Corts Valencianes para la defensa de los derechos y libertades y otro varapalo del Alto comisionado del Congreso de los Diputados por su decisión contraria a la Ley de Memoria Democrática”.
La edil ha relatado que el pasado 22 de diciembre, el Síndic resolvía a favor del Grupo Municipal Socialista recomendando al equipo de gobierno que usara los medios públicos de comunicación para informar a la ciudadanía de forma objetiva evitando las descalificaciones a concejales o partidos. El 16 de enero, Alcaldía asumió las recomendaciones y expresó que las cumpliría con rigor.
“Pues poco tiempo le duró esa etapa de hacer caso al Síndic por parte del PP y a VOX. El 1 de febrero el alcalde hizo unas declaraciones en sala de prensa sobre el monumento franquista de los caídos y vertió sobre el PSOE descalificaciones y acusaciones sin tapujos, declaraciones recogidas por los medios de comunicación”, indica Maciá. Ante ello, el grupo municipal registró un escrito al ayuntamiento solicitando el cumplimiento de la resolución de diciembre del Síndic. “20 días después, el alcalde hacía un vídeo colgado en Instagram descalificando al anterior equipo de gobierno”.
El 23 de febrero se presentó una nueva queja al Síndic de Greuges ya que, por un lado, el ayuntamiento no había contestado al escrito registrado el 2 de febrero, “pero es que, en ese tiempo, se seguía con el uso partidista de las redes sociales municipales”.
Tres días después, el 26 de febrero, el Síndic admite la queja a trámite y le requiere al ayuntamiento información en el plazo de un mes.
El 27 de febrero, el 1 de marzo y el 20 de marzo este grupo añade nuevos hechos que suponen un uso partidista de los medios institucionales en redes sociales a través de videos. “Todo documentado con enlaces”. Se da el caso que el 1 de marzo, Alcaldía responde al escrito de 2 de febrero, una vez el Síndic le había solicitado información.
El 27 de marzo, Alcaldía remite un informe al Síndic exponiendo que el gabinete de prensa está formado por profesionales independientes y cualificados y que las valoraciones de los miembros del gobierno se emitían al amparo de la libertad de expresión.
El 3 de abril, este grupo presenta alegaciones al informe municipal exponiendo que, a pesar de la primera resolución del Síndic y a pesar de que el gobierno se comprometió a acatar sus recomendaciones, el alcalde y algunos de sus concejales hicieron caso omiso y continuaron con la mala praxis. “Respetamos a los profesionales del gabinete de prensa, pero lo que denunciamos es el uso partidista de las redes sociales municipales”.
La institución valenciana explica en su resolución que es fundamental distinguir la “comunicación política” de la institucional u oficial” y que es importante separar la opinión política de la información veraz, ya que no es lícito usar los medios oficiales para cuestionar al adversario político.
El Síndic recuerda que en 2021 intervino cuando “la persona que hoy ostenta la Alcaldía era concejal en la oposición” y que se volvió a pronunciar el 22 de diciembre de 2023.
El Síndic asevera que es necesario extremar los esfuerzos municipales para garantizar la máxima objetividad de vídeos, noticias y declaraciones que se difunden en los perfiles oficiales del ayuntamiento de Elche.
Por ello recomienda de nuevo que se evite el uso de expresiones críticas o descalificativas hacia concejales o partidos de la oposición.
“Por tanto, vemos que Pablo Ruz, sus concejales del PP y su socio Vox no están a la altura de lo que se espera de un gobierno municipal serio, responsable y honesto. Primero fue la destrucción de carriles bici, una zona de bajas emisiones sin sanciones ni control, mantienen un monumento franquista pese a incumplir la ley, reciben dos varapalos del Síndic de Greuges por mal uso de los medios públicos municipales y somos el hazmerreír de España por no saber gestionar una crisis relacionada con el comportamiento impropio de un concejal que ha dimitido, el segundo que dimite en 10 meses. Vaya historial en menos de un año…”.