Cerca de medio centenar personas sin hogar han pernoctado estos días en el espacio habilitado por la Concejalía de Derechos Sociales, en colaboración con varias asociaciones, en el centro social de Palmerales con el objetivo de “garantizar la dignidad de las personas ante la ola de frio que en la que nos encontramos inmersos”. Así lo ha anunciado el concejal de Derechos Sociales, Mariano Valera, quien ha destacado “la obligación de la administración más cercana de garantizar la calidad de vida de toda la ciudadanía, en este caso de las personas que ni siquiera cuentan con un hogar”.
Valera ha explicado que “desde el pasado viernes, 20 de enero, ante la previsión de emergencia por bajas temperaturas, habilitamos un espacio de pernocta en el centro social de Palmerales en coordinación con las entidades que conforman las mesas de trabajo de personas sin hogar”. Según el concejal, el hecho de que el albergue de Cáritas, con el que también colabora el Ayuntamiento, estuviera lleno les llevó a habilitar este nuevo
espacio en el que las personas sin hogar tienen la oportunidad de resguardarse del intenso frio, así como optar a la cena caliente y desayuno”.
Las asociaciones implicadas en esta iniciativa son DYA, que se encargará de los desayunos, limpieza y vigilancia; la Fundación Conciénciate, que se ocupa de las cenas y traslado de personas que tengan dificultad de movilidad y no puedan acudir de forma autónoma; Cruz Roja, que organiza las duchas, higiene, ropa de abrigo, y camas y, por último, Policía Local y Protección Civil, que apoyan a Conciénciate en el traslado de personas y garantizan la seguridad en el recinto. Todo ello, coordinado desde el equipo de profesionales de la Concejalía de Derechos Sociales.
“Estamos convencidos de que no podemos dar la espalda a ningún ciudadano, y haremos todo cuanto esté en nuestra mano para garantizar la dignidad de las personas”, ha asegurado Valera, quien recuerda que “desde
el Ayuntamiento, en coordinación con Cáritas, estamos trabajando en la creación de un centro de baja exigencia, un recurso con el que se completaría en Elche la atención integral de las personas sin hogar”.