La quema de rastrojos y residuos agrícolas vuelve a permitirse de facto con la derogación del artículo tres de la Ley de Residuos propuesta por el Ejecutivo. El alcalde, Carlos González, ha querido trasladar esta mañana al sector agrícola de la localidad que la prohibición de la citada actividad ha quedado anulada con esta modificación en la tramitación de la legislación de la Política Agrícola Común (PAC) mediante una enmienda que se ha introducido en la ponencia de la misma.
“Se deduce que, a partir de ahora, se consiente la quema de residuos agrícolas, algo muy importante para el campo español, y en particular, para el ilicitano”, ha manifestado González, quien ha recordado que, hasta ahora, “estábamos en situación de una moratoria que conseguimos de la mano del Consell, la cual autorizaba llevar a cabo las quemas de manera transitoria”.