Un total de 30 usuarios han participado el programa de Respiro Familiar que este verano se ha desarrollado en el centro social Francesc Cantó

A pesar de la pandemia, un total de 30 participantes han disfrutado de una fiesta de disfraces, almuerzo y muchos bailes

La primera teniente de alcalde y concejala de Educación, María José Martínez, ha visitado el centro social Francesc Cantó, donde se ha celebrado la décima edición del Plan Respira.

La edil ha recordado que “se trata de un programa para personas con discapacidad que se lleva a cabo los sábados por la mañana durante todo el año, pero en condiciones normales, los meses de julio y agosto se traslada a la playa de Arenales. Así, las familias descansan y tienen un día para recargar las pilas”. Asimismo, ha asegurado “que a pesar de la pandemia se han visto muchas caras nuevas y que es un servicio esencial que no se puede perder”.

Antonio Tarí, coordinador de DYA, ha destacado “que este año ha sido diferente, pero se ha hecho todo lo posible para que las actividades se pudiesen desarrollar dentro de la nueva normalidad”. Además, ha afirmado “que los participantes no disfrutan igual porque no es la playa, pero el hecho de salir de su casa, estar con los amigos y hacer actividades ya es un mundo para ellos”.

“Ahora mismo tenemos unos 30 usuarios. Aunque muchas familias han tenido miedo de traer a sus hijos por las circunstancias actuales, pero no nos podemos quejar, ya que durante dos meses no ha surgido ningún problema” ha asegurado Tarí.