Francesc Cantó completó la carrera hacia la Plaça de Baix en dos minutos y sin incidentes

Trancurrida la representación del hallazgo de la imagen de la patrona en la playa del Tamarit y la romería de 14 kilómetros hasta el Hort de les Portes Encarnades, al sur de la ciudad, el guardacostas Francesc Cantó, a las 15:00 horas de ayer sábado, con el sonido de la bombà, salió al galope hacia la Plaça de Baix para anunciar la buena nueva al pueblo de Elche, en un recorrido sin incidentes y ejecutado con elegancia en solamente dos minutos por el jinete Francisco Sanmartín.

El regidor ilicitano, Carlos González, y el presidente de la Sociedad Venida de la Virgen, José Manuel Sabuco, quienes estuvieron acompañados por la consellera de Agricultura, Mireia Mollà, miembros del Equipo de Gobierno y de la Corporación Municipal, recibieron al guardacostas en el despacho del alcalde, quien invitó a brindar a los presentes “por la historia, las tradiciones, las raíces, los símbolos, la identidad colectiva, por la Venida de la Virgen, Cantó y Elche”.

Sanmartín mostró su satisfacción por cómo transcurrió la carrera a caballo hasta el Ayuntamiento, destacando la elevada cifra de asistentes. Sabuco, que felicitó al caballista y a los ilicitanos por mantener la tradición, manifestó que “el futuro de la Venida está asegurado”, recordando que hoy, a las 11:00 horas, se celebrará la Solemne Procesión de la Virgen. Con ella, arrancará el año jubilar que conmemora el 650 aniversario del descubrimiento, el cual, según el presidente de la centenaria entidad, “serán unos doce meses cargados de proyectos y actividades”.

González, por su parte, agradeció a Sanmartín “su implicación y desempeño brillante en el papel de Francesc Cantó”, y a la Sociedad Venida de la Virgen y a Sabuco por la excelente organización, de unas celebraciones que, en palabras del alcalde, “son motivo de alegría y felicidad” para todos aquellos que lleven a Elche en el corazón. Asimismo, aprovechó para indicar que la representación y romería “continuarán siendo en la playa del Tamarit”.

Después de la recepción se leyó el bando con el que se informaba a los ilicitanos e ilicitanas del feliz hallazgo de la Virgen, dando inicio a la romería por las calles de la ciudad con la talla al grito de “¡a la platja Il·licitans!”.